La Reina del Vudú y el Pantano de Manchac
El Pantano de Manchac, situado en las proximidades de Nueva Orleans, en el estado sureño de Luisiana, es considerado un lugar maldito desde hace más de un siglo, y cuya maldición provino nada menos que de una mujer llamada Marie Laveau, también conocida como la Reina del Vudú.
Además de su leyenda negra, el pantano ofrece por sí solo un aspecto bastante inquietante, lo que lo ha convertido en escenario de fondo para más de una película de terror. Y por si esto fuera poco, en él habitan cocodrilos, así que más vale seguir las indicaciones de los guías. También resulta inquietante que los mismos guías se nieguen a adentrarse en determinadas zonas por considerarlas demasiado «oscuras».
Marie Laveau vivió en Nueva Orleans entre los años 1794 y 1881, y durante su vida fue conocida como la más célebre de las sacerdotisas del Voodoo, aunque había sido educada en el catolicismo, siendo tan respetada como temida por su poder. Eran muchos los que acudían a ella en busca de fortuna o amor. Tras la misteriosa desaparición de su primer marido, Jacques Paris, en extrañas circunstancias, Marie vivió un tiempo con Christophe Louis Dumesnil, quien también moriría de manera sospechosa y con el que tuvo nada menos que 15 hijos.
Según cuenta la tradición, Marie fue encarcelada, y mientras permanecía en prisión, lanzó una maldición contra el Pantano de Manchac, lugar que fue azotado después por un terrible huracán que se llevó consigo tres aldeas enteras, y se achaca a su maldición, aunque ocurrió mucho tiempo después de su fallecimiento, en el año 1915. También se dice que por las noches, sobre las aguas del pantano, se puede ver a las brujas volar entre los árboles.
El recuerdo de Marie Laveau continúa en la memoria colectiva de Nueva Orleans, y no es extraño ver a personas que se acercan a su tumba para pedirle algún que otro favor.