El lago Toplitzy y su misterioso tesoro
En los Alpes Austriacos hay un lago que fue utilizado por los nazis como base naval de pruebas, y debido a un curioso incidente ocurrido en los últimos años de la Segunda Guerra Mundial, se ha convertido en uno de los puntos clave de los buscadores de tesoros. Nos referimos al Lago Toplitz, un lugar donde muchos piensan que se puede hallar parte del mítico «tesoro nazi».
Cuentan los campesinos del lugar que una noche, durante el mes de abril de 1945, tropas del ejército nazi y algunos oficiales les obligaron a salir de sus casas en plena noche para ayudarles a trasladar algunas cajas metálicas, muy pesadas según contaron los supervivientes. Su única labor fue llevar las cajas hasta la orilla del lago y después se les permitió volver a sus casas. A la mañana siguiente no quedaba rastro de ellas.
Desde el final de la guerra y hasta hoy en día, han sido muchas las inmersiones realizadas en el lago Toplitz y también se han escrito libros sobre el tema en abundancia, y en la mayoría de los casos se especula con que aquí podría estar el tesoro nunca recuperado de los nazis. Resulta especialmente intrigante, sobre todo porque en ese momento el régimen de Adolfo Hitler estaba llegando a sus últimos momentos, entonces ¿qué podrían querer ocultar o de qué se querrían deshacer en un momento tan vital? Las dos teorías que se barajan son o bien que se trate del botín saqueado durante las ocupaciones (del cual se recuperaron unas 5 toneladas y media tras la guerra), o bien documentación acerca de todo el patrimonio robado al pueblo judío.
Incluso desde el gobierno de Austria se apoya esta búsqueda, dando permiso a numerosos caza-tesoros para explorar el lago. Pero esta no es una tarea fácil, ya que hasta la fecha han fallecido dos buceadores en el intento, atrapados entre los cientos de ramas y troncos que cubren el fondo del lago, a más de 100 metros de profundidad. Algunas expediciones han estado subvencionadas por entidades tan dispares como el gobierno de los EEUU o la revista alemana Stern, y fue esta última expedición la que más ha podido acercarse a una respuesta.
En el año 1959, los buceadores contratados por la revista encontraron algunas de las cajas, y vieron con sorpresa que en su interior había una imprenta de billetes y cerca de 72 millones de libras falsificadas. Por lo visto, este dinero falso era parte de un plan urdido por los nazis (la Operación Bernhard), con objeto de desestabilizar la economía de Gran Bretaña. Más recientemente, en 1983, un biólogo halló más dinero falso, además de algunos restos de artefactos explosivos, detonados hacía mucho tiempo.
Si la mayor parte del misterioso botín ya ha salido a la luz, o si permanece aún oculto bajo la gruesa alfombra de troncos que cubren el fondo del lago Toplitz, es algo que aún no podemos saber.