Cueva de los Verdes, maravilla natural
La Cueva de los Verdes es un túnel formado por la lava del Volcán La Corona, situado en la isla de Lanzarote, en las Islas Canarias. Este lugar es una zona protegida por el Gobierno local debido a su gran importancia, ya que es el túnel volcánico más interesante y de mayor tamaño en todo el planeta.
Esta cueva, que debe su nombre a la familia Verdes, fue creada hace aproximadamente 3.000 años, como resultado de una erupción volcánica de La Corona. Una gran corriente de lava recorrió el Malpaís de la Corona, y con el tiempo, la parte superior solidificada dio origen a la formación de la cueva.
En su interior se encuentran cavidades infladas por gases volcánicos que estallaron en distintos puntos, dando lugar a galerías superpuestas, unidas únicamente en ciertas áreas por espacios verticales. Este fenómeno único convierte a la cueva en un tesoro geológico de gran valor.
Un lugar preparado para los visitantes
En 1964 se habilitó un recorrido de aproximadamente 2 kilómetros para que los turistas pudieran disfrutar de esta maravilla natural. Se instaló una iluminación sencilla pero refinada que otorga un aire teatral al impresionante paisaje, atrayendo a cientos de visitantes de todas partes del mundo hasta el día de hoy.
Historia y curiosidades de la Cueva de los Verdes
En siglos pasados, los aborígenes de Lanzarote utilizaban la cueva como refugio para protegerse de ataques, especialmente de piratas. En la actualidad, los turistas visitan el lugar maravillados por su belleza natural, que combina colores únicos con los efectos creados por la iluminación.
La cueva cuenta con un salón de conciertos que puede acoger a entre 15 y 20 filas de sillas, con capacidad para unas 500 personas, lo que lo convierte en un espacio especial para eventos culturales.
Durante la visita, también es posible explorar áreas más profundas del túnel y admirar las secciones cubiertas por agua de mar, que añaden un toque único a la experiencia.