Comamos Guacamole y que ¡Viva México!
El guacamole es una salsa mexicana preparada a base de aguacate o palta y chile verde.
El nombre guacamole proviene del náhuatl Ahuacamolli que traducido al español, se compone de las palabras Ahuacatl (aguacate) + molli (mole o salsa).
El aguacate tenía una significación erótica para los aztecas, tanto que las mujeres no podían realizar la recolección de los frutos, ya que simbolizaban los testículos.
Según la mitología prehispánica, Quetzalcoatl, el dios tolteca, ofreció la receta del guacamole a su pueblo, quienes la extendieron por el territorio de Mesoamérica.
Origen
El guacamole, receta impulsada por la civilización azteca, constituye un plato nutritivo que permite beneficiarnos de las propiedades del aguacate.
El guacamole, originariamente conocido como guacamol en Centroamérica y Cuba, es una deliciosa salsa de aguacate procedente de la civilización azteca.
La receta, extendida tiempo después de la mano de los conquistadores entre los países europeos, ha evolucionado según la ubicación geográfica tanto en usos como en ingredientes.
Eventualmente, con la llegada de insumos de otros lugares, vía los conquistadores españoles, a la receta se agregarían ocasionalmente otros ingredientes como cebolla, limón, pimienta, ajo o cilantro.
Un rico manjar que hoy podemos cocinar fácilmente y que merece ser conocido.
Las culturas precolombinas contaban con un buen conocimiento sobre el aguacate, como se observa en el Códice Florentino. Donde se mencionan tres tipos principales: aoácatl, quilaoácatl y tlacacoloácatl, que por su descripción podrían equivaler a las tres especies principales de esta planta: mexicana, guatemalteca y antillana, respectivamente.
Otras fuentes corroboran la importancia de la cucata, nombre totonaca del aguacate, como en el Códice Mendocino, donde el árbol de este fruto se representa en un jeroglífico que indica el pueblo de Ahuacatlán.
De hecho, hoy en día hay numerosos lugares y poblaciones cuyo nombre está ligado a esta fruta, como Ahuacatenango, Chiapas, “en el recinto de los aguacates”; Ahuacatepec, Veracruz, o Aguacatitlán, Guerrero, Jalisco y Estado de México, “lugar de aguacates”.
Evolución del Guacamole
Los españoles trajeron los productos lácteos, el aceite, el vinagre y componentes que fueron adoptados como parte de los sabores de México, como lo son el cilantro y la cebolla.
Todos estos productos han sido usados en el guacamole para agregarle tersura o para incluir acidez y sumar con esta preparación que principalmente sabe a México.
El México independiente y el Porfiriato añadieron las variantes de incluir tomate verde y ajo.
En la actualidad, se incluyen diferentes frutas en el guacamole como el mango o la sandía, no sin que falte el chile.

Conclusión
Los ingredientes que incluyen una preparación nos pueden decir de qué época viene esa salsa, pero en el siglo que fuere y con las variantes que el paladar necesite para adaptarse, la creación más popular y deliciosa que podemos encontrar hecha con aguacate, en las mesas mexicanas, es sin duda el guacamole.
Receta
- 2 cucharadas de cebollas finamente picadas
- 4 chiles serrano finamente picados
- 3 cucharadas de cilantro finamente cortado
- Sal al gusto
- 3 aguacates grandes
Preparación
- Muela en conjunto la cebolla, los chiles, el cilantro y la sal al gusto.
- Corta los aguacates por la mitad, quitándoles el hueso y exprimiéndole la pulpa de las cáscaras. Machácalos y agrega a la base de los chiles para obtener una consistencia con cierta textura. Reserva una cucharada de jitomate y agrega el resto. Ajusta la sazón y vierte después el resto del jitomate, la cebolla y el cilantro picados.
- Sirve inmediatamente a temperatura promedio junto con tortillas, tostadas e inclusive carnitas. No se recomienda meterlo al refrigerador.