¿Qué es el hirsutismo y a quién afecta?
El hirsutismo es una patología que afecta a un 10% o 15% de las mujeres en edad reproductiva. Se caracteriza por el crecimiento excesivo de vello oscuro y grueso en zonas del cuerpo que tienen dependencia hormonal como la cara, el pecho, la parte inferior del abdomen, la espalda o la cara interna de los muslos.
Está relacionado con la hiperandrogenemia (niveles incrementados de los andrógenos en la sangre), aunque diversos estudios han puesto de manifiesto que en los casos leves de hirsutismo se han mostrado unos niveles normales de andrógenos. Suele provocar un fuerte impacto psicológico en la paciente al afectar en su día a día. Incluso puede derivar en depresión, por la importante repercusión estética que tiene.
Principales causas del hirsutismo
No existe una causa concreta para padecer esta patología. De hecho, hay mujeres que no notan el crecimiento excesivo de vello cuando aparece, porque coincide con el momento en el que comienzan a tener pelo en las axilas y las ingles y no lo diferencian. No obstante, hay factores que pueden influir. Los principales son:
- Síndrome de ovarios poliquísticos (SOP): El crecimiento excesivo de vello corporal, así como la disfunción ovárica, son los principales criterios diagnósticos de esta enfermedad. El hirsutismo se da en el 60% de las pacientes con SOP.
- Síndrome de Cushing: Aparece cuando el organismo está expuesto a altos niveles de cortisol.
- Características raciales y herencia.
- Disfunción de la tiroides: Está relacionado en raras ocasiones.
- Obesidad.
- Hiperplasia adrenal congénita: Es la causa más frecuente del hiperandrogenismo.
- Tumores secretantes de andrógenos: Representan entre el 0,2% y el 0,6% de los casos.
- Toma de medicamentos: Algunos utilizados para la pérdida de cabello como el minoxidil u otros que se utilizan para el tratamiento de la endometriosis como el danazol favorecen su aparición.
Diferentes tratamientos
Cuando una adolescente presenta hirsutismo, el médico lo primero que busca son soluciones no farmacológicas. En este sentido, recomienda el uso de cremas depilatorias o la depilación por láser para hacer desaparecer el vello no deseado. La fotodepilación ofrece buenos resultados en pacientes con estos problemas. No obstante, es importante saber que, como es una patología de dependencia hormonal, el tratamiento se puede extender más tiempo del deseado.
La gravedad o no del hirsutismo muchas veces depende de la valoración subjetiva que realiza la paciente de su problema. Cuando la depilación no es suficiente, se puede optar por la toma de medicamentos. Los principales, según indican en el artículo "Hirsutismo. Un problema estético en Adolescentes" son:
- Anticonceptivos orales: Que tengan combinación de estrógenos y progestágenos, evitando el levonorgestrel, que tiene efecto androgénico. Con este tratamiento se consigue una reducción del 60% del hirsutismo.
- Antiandrógenos: Como la ciproterona o la espironolactona disminuyen el hirsutismo entre un 60% y un 70%. Se recomiendan cuando el hirsutismo es moderado o severo y va acompañado también de acné. No deben tomarse si la mujer quiere quedarse embarazada, puesto que produce una feminización del feto.
- Eflornitina: Es un tratamiento farmacológico del hirsutismo que muestra sus beneficios después de 6 meses.
